Las heladas de abril tuvieron un gran impacto en el cultivo de frutas en Francia. «En este momento el suministro de albaricoques no es del todo malo, pero la calidad difiere mucho según la variedad y la región. Y es que hay regiones que han sufrido mucho por las heladas», dice Theo Kampschoer, de Kampexport, un holandés que este año celebra su 60 aniversario de actividad en el comercio de frutas y hortalizas en Francia.
«Solo los productores de las regiones donde las heladas no hayan sido tan severas y que hayan invertido mucho dinero en medidas preventivas, como en velas antiheladas, mallas o molinos de viento, tienen un rendimiento del 80%. Los otros agricultores solo cosecharán entre el 10 y el 30% de la producción habitual», detalla Theo.
Según el exportador, solo se notará la falta de disponibilidad cuando empiece la cosecha de la variedad Bergeron en el valle del Ródano. «La escasez de producto se notará desde la segunda quincena de julio y durante todo el mes de agosto. Habrá un 80% menos de producto. La cosecha de melocotones y nectarinas se quedará en un 50-70%, dependiendo de la región y de la presencia de sistemas antiheladas. La merma en la producción de peras en el departamento de Vaucluse rondará el 50% y la de manzanas, el 30%».