024 septiembre, 2020

Las cooperativas del Bajo Aragón se preparan para abordar las variedades de melocotón tardías en septiembre, en una campaña en la que, debido a la pandemia, ha cambiado el perfil de los trabajadores contratados. Las restricciones a la movilidad durante el estado de alarma en España, que impidieron la llegada de temporeros extranjeros, y el cierre de la hostelería han despertado el interés de los jóvenes de la comarca por trabajar en el campo.

Samuel Sancho, presidente de la D.O. Melocotón de Calanda, señaló que en las cooperativas turolenses de la demarcación el porcentaje de personal del territorio habría supuesto hasta el 50-60% de la plantilla. Se trata tanto de jóvenes estudiantes como de otros vecinos de la zona que habitualmente eran empleados de la hostelería y que este 2020 no han podido acceder a ello. Según Sancho, el pasado año estos perfiles constituían tan solo el 10% de los trabajadores de estas cooperativas.

Desde otras empresas del territorio que no se inscriben dentro de la D.O. también han notado el aumento de personal de la zona, destacando el número significativo de jóvenes que este verano han apostado por el sector. “Este año han tenido un papel importante en el almacén y en el campo. La mayoría son personas que están estudiando y que aprovechan estos meses para ganar algún dinero”, apuntó Carmen Rebullida, trabajadora de la Cooperativa San Miguel de Calanda.

Sergio Conesa y María Alcázar tienen 18 y 21 años respectivamente, son de Calanda y para ambos este ha sido su tercer verano en el almacén de esta cooperativa. “Aquí de toda la vida ha estado la opción de embolsar o ir al almacén en verano para sacarte un dinero para invierno”, dijo Conesa que este último curso lo ha pasado en Caspe. “Mi madre, mis tías… muchos en casa hemos pasado por este trabajo y es que en Calanda es una buena forma de conseguir ahorros y seguir con tus estudios”, añadió Alcázar que se despide del almacén para comenzar su último año de Trabajo Social en la Universidad de Zaragoza.

Buenas perspectivas

Desde la cooperativa definen esta campaña de “estupenda”. “De momento, está yendo muy bien porque acompañan los precios y acompaña la fruta”. Coinciden en el optimismo en la D.O. Melocotón de Calanda donde prevén una campaña «normal» que podría llegar a los kilos que se certificaron el año pasado o incluso superarlos. Es decir, pasar los tres 3,5 o, en el mejor de los casos, quedarse cerca de los 4 millones.