La rentabilidad de la fruta de hueso está siendo alta este año después de varias campañas seguidas difíciles. La disponibilidad de fruta es menor, tanto por la reducción de la superficie como, sobretodo, por el descenso de la producción resultado de las adversidades climáticas en todas las zonas productoras, ya sean abundantes lluvias, granizo u olas de calor.
“Los precios están siendo muy atractivos, sobre todo para aquellos que no se han visto tan afectados por las abundantes mermas o aquellos que cuentan con una mayor infraestructura comercial”, cuenta Rosa Hernandorena, directora comercial de Viveros Hernandorena. “En algunos momentos hay incluso especies de fruta de hueso con rotura de stocks debido a la fuerte demanda y escasez de volúmenes”, añade.
Lo cierto es que esta situación está motivando a algunas empresas frutícolas a volver a invertir en renovar parte sus plantaciones con nuevas variedades o incluso ampliarlas, de acuerdo con Rosa Hernandorena. “A pesar de las restricciones que hemos tenido para llevar a cabo las visitas a nuestro campo catálogo, está despertando la demanda de plantones tras al menos 4 años en los que apenas se ha plantado nada. Estamos empezando a recibir pedidos sobretodo de planta de nectarina y, en menor medida, paraguayo, mientras que en albaricoque, melocotón y ciruelo continúa bastante parado. Hay más agricultores renovando parcelas e incluso realizando ampliaciones”.
Según la directora comercial de esta empresa valenciana, se está apostando principalmente por variedades ya consolidadas en el mercado, ya que la consecución de malas campañas no deja lugar para tomar riesgos. “A nivel comercial, los agricultores están buscando especies y variedades más específicas para cubrir huecos de producción según la zona de producción. Si bien en los años anteriores se ha apostado mucho por variedades extra tempranas, ahora se busca plantar a partir de mediados de mayo, ya que la fruta, además de tener más brix, mayor consistencia, calibre y sabor, también ofrece mayores rendimientos. El sector vive una revolución en la búsqueda del sabor como pilar fundamental para la inversión en nuevas variedades y está habiendo una implicación en este aspecto en toda la cadena de valor, desde los obtentores y los viveros hasta los productores, comercializadores y la gran distribución”.
Tablas de resultados de variedades de frutales de 2020 y 2019
Haciendo clic en este enlace pueden verse las tablas de los resultados de las nuevas variedades de campo catálogo de Viveros Hernandorena de 2020, a las cuales se han añadido también las especificaciones en grados Brix y penetrometría, una información de gran interés para productores y comercializadores.
Haciendo clic en este enlace se encuentra los resultados del año 2019, para hacer la comparativa.
El vivero está realizando ahora los micro-injertos de verano para poder atender los pedidos según la cantidad, variedad y patrón que decide cada cliente dependiendo del proyecto. “La ventaja que esto tiene es que llevamos a cabo los injertos utilizando material vegetal de nuestros campos de planta madre, y en un corto periodo de tiempo tenemos la planta preparada mediante un sistema de producción muy controlado. Lo que injertamos ahora en julio y agosto atenderá los proyectos de plantación de otoño e invierno. Es un sistema de multiplicación seguro y rápido que permite atender en base a las necesidades de cada cliente sobre pedido”.
“También destacamos la utilización de patrones híbridos certificados y macetas de un litro con fibra de coco, un medio inerte muy sano para la planta, así como abono de liberación lenta, para que la planta tenga un buen agarre y desarrollo”, concluye Rosa Hernandorena.